En las instalaciones de la Secretaría Distrital de Salud se desarrolló este martes la Jornada de promoción de entornos libres de humo de tabaco y aerosoles con el objetivo de reconocer los retos de salud pública asociados al uso del vapeo principalmente en adolescentes y jóvenes. 

El humo del tabaco y los aerosoles contienen sustancias tóxicas que pueden afectar gravemente la salud de quienes están expuestos. Al crear espacios libres de humo, estamos protegiendo a la población de los efectos nocivos del tabaquismo y el vapeo. 

“Los adolescentes y jóvenes son especialmente vulnerables al inicio del consumo de tabaco y productos relacionados con el vapeo. Al promover entornos libres de humo, estamos reduciendo la probabilidad de que comiencen a fumar o vapear”, sostuvo el secretario de Salud, Gerson Bermont, agregando que “tenemos que empezar esa gran ruta, nuevamente, de lucha contra un producto que nos está haciendo mucho daño en nuestra población”. 

Los Sistemas Electrónicos de Administración de Nicotina (SEAN) y Sistemas Similares de Administración Sin Nicotina (SSSN), son dispositivos que generan un aerosol que contienen aromatizantes mediante el calentamiento de un líquido, normalmente disueltos en propilenglicol. 

Los dispositivos que se encuentran disponibles se conocen como: cigarrillos electrónicos, narguiles, vapeadores, productos de tabaco calentado (PTC) y sistemas de tanque. 

De acuerdo con los estudios más recientes, tanto del nivel nacional como distrital, se identifica una reducción sostenida del consumo de cigarrillo y un incremento paulatino y sostenido del uso de Sistemas Electrónicos de Administración de Nicotina –SEAN, de Sistemas Similares sin Nicotina -SSSN y Productos de Tabaco Calentados -PTC. 

Las emisiones de estos dispositivos son nocivas tanto para los usuarios como para los no usuarios expuestos a los aerosoles ajenos. Los efectos en la salud descritos van desde irritación de los ojos hasta aumento de enfermedades cardiovasculares, respiratorias, gastrointestinales y cáncer. 

El secretario fue enfático en decir que “hoy la Secretaría de Salud le dice no a los cigarrillos electrónicos, no a vapear, no a esta moda que está causando daño, enfermedad y muerte en nuestra población. Hoy le digo a las industrias, no aceptamos efectivamente esta propaganda indebida que hacen de que es algo inocuo, de que es algo que no hace daño. Hace mucho daño, invito a nuestros jóvenes a cambiar estas prácticas, invito a nuestros jóvenes a tomar conciencia del peligro al que nos estamos enfrentando”. 

“Estamos comprometidos en proteger la salud de nuestros ciudadanos más jóvenes. Al promover entornos libres de humo, estamos construyendo un futuro más saludable para Bogotá”, agregó Bermont. 

La acumulación de riesgo en la vida de cada persona generará cambios a nivel poblacional que se verá reflejado en pérdida de calidad de vida a edades más tempranas. Algunas de las afectaciones a las que nos podemos enfrentar son aterosclerosis, hipertensión, arritmia, infarto de miocardio e insuficiencia cardiaca. 

Al tener espacios libres de humo y aerosoles en instituciones educativas, lugares de trabajo, parques y otros lugares públicos, estamos enviando un mensaje claro de que valoramos la salud y el bienestar de nuestra comunidad. 

“Se requiere proteger a los niños, jóvenes y a los no fumadores del uso y exposición de los cigarrillos convencionales y los nuevos dispositivos electrónicos para avanzar en la reducción de los efectos que producen en la salud de las personas y en el medio ambiente”, indicó el secretario, explicando que desde la institucionalidad podemos aportar generando una alianza para mantener nuestros entornos libres del humo de tabaco y aerosoles. 

Estas deben ser alianzas público – privadas para el bien común. Es importante recordar que el vapeo no es vapor de agua. Que no tenga humo, no significa que sea inofensivo. “Los dispositivos que no generan combustión también son nocivos”, enfatizó el secretario de Salud.